‘Ice Age: El gran cataclismo’ se alza con el nº1 en España

Tras dominar la taquilla española durante tres semanas, Buscando a Dory ha dado el relevo en el liderato de las recaudaciones nacionales a la quinta entrega de Ice Age. Animación por animación, que demuestra que es uno de los medios más fiables de cara a la taquilla en temporada vacacional. Leyendo críticas de otros medios, como la de Jordi Costa en El País, parece que esta nueva entrega sigue con los mismos problemas y virtudes de las anteriores. Triunfa en el corto alcance, en los gags y el slpastic de Scrat, pero sigue siendo un todo vale en cuanto aumentamos la escala y observamos el conjunto, donde el desarrollo de los acontecimientos parece ser una simple excusa para seguir explotando las dinámicas de ese improbable grupo de amigos prehistóricos.

Segundo puesto para la Election: La noche de las bestias. La tercera entrega de la saga distópica vuelve a retratar ese Estados Unidos que parece una mala pesadilla especulativa sobre lo que supondría el triunfo político de mentes que hacen una lectura aberrante de ese teórico paraíso de libertades que es ese país. Que no gane Trump, por favor. La película viene precedida de críticas suficientemente dignas en Estados Unidos y sigue el sendero trazado en la segunda entrega, superior a la fundadora, de la mano de Frank Grillo delante de la pantalla y James DeMonaco tras ella.

En cuarto lugar entra el nuevo trabajo de Jaume Collet-Serra. El realizador catalán vuelve a cuajar un trabajo de alto nivel como director pese a que la historia parece limitar algunas de sus posibilidades más jugosas tal y como os contaba Rafa en nuestra reseña. Esforzado trabajo de la protagonista, Blake Lively, en este mano a mano con un tiburón que ha probado sangre y no piensa dejar escapar a su presa.

Por último, en décimo puesto tenemos Premonición, thriller sobrenatural protagonizado por Anthony Hopkins y Colin Farrell, siendo el primero un psíquico que ayuda a la policía en la caza del segundo, un asesino en serie que está sembrando el caos. Un título cuyos orígenes se remontan a mediados de los noventa, cuando intentó convertirse en una un tanto improbable secuela de corte fantástico de Seven. Su 41/100 en Metacritic desilusiona sobre el resultado de una idea que, bien jugada, podría haber sido bastante resultona.